Con una forma rectangular llamativa, y un corte liso que contrasta con la roca rugosa de su alrededor, una formación geológica de Marte ha despertado la imaginación más febril, llegándose a tejer teorías conspirativas de lo más arriesgadas. ¿Civilizaciones antiguas en el planeta rojo? ¿un «pasadizo» en el planeta vecino creado por extraterrestres?
Pero no, lo que muestra la foto tomada por el robot Curiosity tiene, según NASA, una explicación más lógica: todo es cuestión de perspectiva. La NASA identificó la imagen como parte de la serie «Sol 3466», que se publicó en varios fotogramas en el sitio web del Programa de Exploración de Marte. Esa imagen en concreto es solo una parte de una serie que, al verla en toda su composición, hace cambiar la perspectiva de su dimensión y forma. «Es una toma muy ampliada de una pequeña grieta en una roca», le explicó la NASA a BBC Mundo.
En la siguiente imagen se puede ver la composición que forma toda la serie de imágenes 3466. Se aprecia allí, marcada con un círculo rojo, lo pequeña que es la fisura en esa roca del cráter Jezero, el cual ha explorado el robot Curiosity en las últimas semanas.
Los científicos del Laboratorio de Propulsión a Chorro han subrayado lo pequeña que es la grieta, de aproximadamente 30 cm de ancho por 45 cm de largo. Según los expertos, las fracturas del terreno pueden formar ese tipo de grietas de manera natural. En este caso, una fractura vertical se cruza con los estratos o capas hasta formar ese tipo de cortes.
La NASA informó que el tensado de las 5 capas del parasol del telescopio espacial James Webb se completó hoy, a poco más de 10 días del inicio de la misión.
Los ingenieros en tierra van orquestando de forma remota una secuencia compleja de despliegues en las horas y días inmediatamente posteriores al lanzamiento del telescopio. Esta animación muestra la secuencia nominal de estas implementaciones:
Más animaciones mostrando los diferentes procedimientos pueden observarse en el sitio del Conceptual Imagen Lab de la NASA.
El telescopio espacial James Webb (JWST, por sus siglas en inglés) es un telescopio desarrollado por la NASA con contribuciones de la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Espacial Canadiense (CSA). El telescopio lleva el nombre de James E. Webb, quien fue el administrador de la NASA desde 1961 hasta 1968 y jugó un papel integral en el programa Apollo.
Este telescopio está destinado a suceder al telescopio espacial Hubble como la misión insignia de la NASA en astrofísica. Se lanzó el 25 de diciembre de 2021 en el vuelo VA256 del cohete Ariane 5. Está diseñado para proporcionar una resolución infrarroja y sensibilidad mejoradas, y permitirá una amplia gama de investigaciones en los campos de la astronomía y la cosmología.
Foto de Ganímedes, la única luna conocida que tiene un campo magnético, tomada por la nave Juno de la NASA el pasado el 7 de junio de 2021
El 7 de junio pasado, la sonda espacial Juno de la NASA realizó su sobrevuelo más cercano a Ganímedes, la luna de Júpiter. Mientras pasaba a toda velocidad, Juno grabó las ondas electromagnéticas de aquella luna.
Los investigadores crearon una pista de audio a partir de datos recopilados por la nave. En 50 segundos, el archivo presenta una amplia gama de sonidos como silbidos, después de ser convertida a una frecuencia audible para el oído humano.
Alrededor del punto medio de la grabación se escucha un cambio brusco de frecuencias, que pudo haber ocurrido cuando la sonda entró en una parte diferente de la magnetosfera de Ganímedes. Aún se están realizando más análisis de las ondas recopiladas por la sonda.
Así suena la banda sonora de Ganímedes, la luna más grande del sistema solar:
Hoy lunes, el helicóptero Ingenuity de la NASA se convirtió en el primer vehículo de la historia en realizar un vuelo controlado y con motor en otro planeta. El equipo deIngenuity del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la agencia en el sur de California confirmó que el vuelo tuvo éxito después de recibir datos del helicóptero a través del rover Perseverance de la NASA a las 10:46 GMT. La imagen de más arriba fue captada por el propio helicóptero mientras ascendía en su vuelo.
El helicóptero de energía solar despegó por primera vez a las 7:34 GMT – 12:33 hora solar media local (hora de Marte), una hora que el equipo de Ingenuity determinó que tendría condiciones óptimas de energía y vuelo. Los datos del altímetro indican que Ingenuity subió a su altitud máxima prescrita de 3 metros y mantuvo un vuelo estacionario estable durante 30 segundos. Luego descendió y volvió a tocar la superficie de Marte, después de registrar un total de 39,1 segundos de vuelo. Se esperan detalles adicionales sobre la prueba en los próximos enlaces descendentes.
“Ingenuity es lo último en una larga y legendaria tradición de proyectos de la NASA que logran un objetivo de exploración espacial que antes se creía imposible”, dijo el administrador interino de la NASASteve Jurczyk.“El X-15 fue un pionero del transbordador espacial. Mars Pathfinder y su rover Sojourner hicieron lo mismo para tres generaciones de rovers de Marte. No sabemos exactamente a dónde nos llevará Ingenuity, pero los resultados de hoy indican que el cielo, al menos en Marte, puede no ser el límite».
El micrófono ubicado en uno de los laterales del rover Perseverance registró estos sonidos el pasado 20 de febrero, en los que el viento se hace audible. Esta es la primera vez que se equipa un vehículo marciano con un micrófono.
La foto muestra el paracaídas del rover Perseverance en el momento de desplegarse, con el detalle de los patrones de color utilizados en su confección. Se trata de un mensaje, en código morse: «Atrévete a cosas poderosas»(‘Dare mighty things’, en inglés).
Además del mensaje, pueden leerse las coordenadas del NASA Jet Propulsion Laboratory(34°11’58» N 118°10’31» W) ubicadas en el borde del paracaídas.
Cosas de nerds, que le dicen… 😉
Fuente: Andrea Guzmán Mesa, astrofísica bogotana, en Twitter.
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Esta es la primera imagen enviada por el Perseverance Rover desde Marte, ayer 18 de febrero de 2021. La vista está parcialmente oscurecida por una cubierta de polvo. Después de un viaje de siete meses, el rover de la NASA aterrizó con éxito en el Planeta Rojo.
Luego de un viaje de 203 días y 472 millones de kilómetros, la quinta y más compleja misión de la agencia aterrizó en el cráter Jezero. Acto seguido comenzaron las operaciones para probar la salud del rover. La misión Mars 2020 se lanzó el 30 de julio de 2020 desde la Cabo Cañaveral en Florida, con la misión de recolectar muestras de Marte y devolverlas a la Tierra.
«Este aterrizaje es uno de esos momentos cruciales para la NASA, los Estados Unidos y la exploración espacial a nivel mundial, cuando sabemos que estamos en la cúspide del descubrimiento y afilamos nuestros lápices, por así decirlo, para reescribir los libros de texto», dijo el administrador interino de la NASA Steve Jurczyk.
Así celebraban el momento en el Laboratorio de Propulsión a Chorro(JPL, por sus siglas en inglés) de la NASA, en el sur de California:
El vehículo, que tiene el tamaño aproximado de un automóvil y pesa 1.026 kilogramos, será sometido a pruebas uno o dos meses antes de comenzar su investigación científica de dos años. Si bien el rover investigará la roca y el sedimento del antiguo lecho del lago y delta del río Jezero para caracterizar la geología y el clima pasado de la región, una parte fundamental de su misión es la astrobiología, incluida la búsqueda de signos de vida microbiana antigua.
El retorno a nuestro planeta permitirá a los científicos estudiar muestras recolectadas y buscar signos definitivos de vida pasada. Los científicos han determinado que hace 3.500 millones de años el cráter tenía su propio delta fluvial y estaba lleno de agua.
Equipado con siete instrumentos científicos primarios, la mayor cantidad de cámaras jamás enviadas a Marte y un complejo sistema de almacenamiento de muestras, el Perseverance recorrerá la región de Jezero en busca de restos fosilizados de antigua vida marciana microscópica.
Un conjunto de sensores recopiló datos sobre la atmósfera de Marte durante la entrada, y el sistema de navegación controló de forma autónoma a la nave durante el descenso final. Se espera que los datos de ambos sistemas ayuden a futuras misiones humanas a aterrizar en otros mundos de manera más segura y con mayores cargas útiles.
El rover Perseverance descendiendo sobre la superficie de Marte.
En la superficie de Marte, los instrumentos científicos de Perseverance tendrán la oportunidad de brillar: Mastcam-Z, un par de cámaras científicas con zoom ubicadas en el mástil, crearán panoramas 3D en color de alta resolución del paisaje marciano. La SuperCam, también ubicada en el mástil, utiliza un láser pulsado para estudiar la química de las rocas y los sedimentos, y tiene su propio micrófono para ayudar a los científicos a comprender mejor las propiedades de las rocas, incluida su dureza.
Ubicados en una torreta al final del brazo robótico del rover, un conjunto de instrumentos trabajarán juntos para recopilar datos sobre la geología de Marte, estudiando las superficies de las rocas y trazando un mapa de la presencia de ciertos minerales y moléculas orgánicas, los componentes básicos del carbono para la vida en la Tierra.
El chasis del rover también alberga tres instrumentos científicos, que se utilizarán para determinar cómo se formaron las diferentes capas de la superficie marciana con el tiempo. Los datos podrían ayudar a allanar el camino para futuros sensores que busquen depósitos de hielo subterráneos. Otros instrumentos del vehículo proporcionarán información clave sobre el tiempo, el clima y el polvo de Marte en la actualidad. A su vez, un dispositivo denominado MOXIE (Experimento de Utilización de Recursos In-Situ de Oxígeno de Marte, en inglés) intentará fabricar oxígeno a partir del aire. Las respuestas que brinde este experimento serán fundamentales frente a la perspectiva de viajes tripulados al planeta.
El vehículo está equipado además, con el diminuto helicóptero Ingenuity Mars, con el que se intentará el primer vuelo controlado y motorizado en otro planeta.
Y finalmente, nos lleva a nosotros, habitantes del planeta: en la foto más bajo se observa el dispositivo en el que se encuentran tres chips en los que están almacenados los nombres de casi 11 millones de personas que aceptaron apoyar de este modo el proyecto.
La misión Perseverance Mars 2020 es parte del enfoque NASA’s Moon to Mars, que incluye misiones de Artemisa a la Luna como preparación para la exploración humana de Marte.
La NASA acaba de publicar un audio de 60 segundos, captado el 19 de octubre pasado por uno de los micrófonos del vehículo explorador Perseverance, que actualmente realiza su vuelo interplanetario camino a Marte para arribar el próximo 18 de febrero.
«Sonidos interplanetarios del ‘rover’ Perseverance», tal el nombre de la publicación, se puede escuchar en SoundCloud. Pero, estimado lector, no espere nada espectacular: solo recoge los sutiles sonidos del funcionamiento de los mecanismos del propio ‘rover’. Pero claro, no deja de ser fascinante imaginar todo lo que rodea a la grabación de esos sonidos.
Las ondas sonoras no se propagan en el espacio abierto, pero sí viajan sobre objetos sólidos. Por esta razón se necesitan micrófonos para monitorear el funcionamiento del explorador, que se activan durante las verificaciones. El vehículo cuenta con dos micrófonos, uno instalado en la cámara SuperCam y otro denominado EDL que está diseñado para registrar el ingreso a la atmosfera y el aterrizaje del aparato. Captar los sonidos durante el viaje, significa que el sistema está en funcionamiento y listo para el momento de la llegada al planeta rojo.
La misión de este nuevo vehículo explorador será buscar rocas que contengan posibles signos de una antigua vida microbiana. Mientras tanto, podemos acompañarlo en su vuelo rumbo a Marte, desde el sitio de NASA.
¿Un controlador de Lego comandando una bandada de drones? Sí, son los «Ladrillos voladores».
Gracias a una asociación entre Creative Play Lab de Lego y el Human Media Lab de Queen’s University en Canadá, se creó un set de Lego verdaderamente único, que fuera presentado en febrero de 2018 en la Lego World Expo en Copenhague .
Los asistentes a aquella ya clásica muestra pudieron crear su propio controlador de drones Lego y manejar un grupo de ellos en tiempo real.
Representación artística de lo que podría llegar a suceder, de no hallar una pronta solución
El síndrome de Kessler o cascada de ablación es un escenario planteado por Donald J. Kessler, consultor de la NASA, según el cual el volumen de basura espacial en órbita baja terrestre sería tan alto que los objetos en órbita serían impactados con frecuencia por ella, generado así más basura y un mayor riesgo de otros impactos.
Cuando un satélite deja de funcionar o ya no es necesario, quedan allí en su órbita. Esos satélites muertos o partes de ellos representan una amenaza. Evitar colisiones mediante maniobras evasivas consume combustible y tiempo, y esos objetos en órbita no pueden ser controlados desde la Tierra, por lo que no hay forma de prevenir una colisión.
A modo de ejemplo y según la NASA, un pequeño fragmento como una mancha de pintura de 1 cm viajando a 10 km/s puede provocar el mismo daño que un objeto de 250 kg a 100 km/h en la Tierra. Si en cambio, el tamaño del fragmento fuera de 10 cm, dicho proyectil tendría una fuerza aproximada de 7 kg de TNT. Una verdadera pesadilla.
El objetivo principal de ClearSpace-1 será un objeto de 100 kg dejado a unos 800 km sobre la Tierra por el lanzador Vega en el año 2013, relativamente ligero y fácil de capturar. Será capturado con cuatro brazos robóticos que lo arrastrarán fuera de la órbita de la Tierra, para finalmente terminar ardiendo ambos en la atmósfera.
El objetivo a futuro es crear un robot de limpieza permanente que pueda expulsar basura espacial a la atmósfera sin tener que desprenderse de la propia nave en cada operación de limpieza. Por el momento se trata de probar si el concepto funciona.
Las que conducen y arrastran al mundo no son las máquinas sino las ideas.
Victor Hugo, poeta, político e intelectual francés
La tecnología no comienza ni termina en la computadora o el celular, claro. Por eso creo necesario correr la mirada desde las nuevas tecnologías, tan presentes en la educación hoy, hacia las tecnologías en general, como un intento de recuperar el carácter social y el pensamiento crítico que deberían acompañar a los avances tecnológicos. Aunque por supuesto también hablamos de artilugios y dispositivos, aquí tomamos nota de otras cuestiones acerca de la tecnología que también importan.
Enrique A. Quagliano Docente de áreas tecnológicas -Computación, Robótica, Educación Tecnológica-, informático y comunicador.
Diego F. Craig es Mgter. en Tecnología Educativa y Competencias Digitales, Licenciado en Tecnología Educativa, Profesor de Educación Técnico-Profesional y...